En nuestra segunda visita a Londres, ciudad en la que solo estaríamos un fin de semana aprovechando un concierto de U2, buscábamos un hotel barato, al ser posible en una zona céntrica de Londres, algo que es prácticamente imposible ya que al día de hoy cualquier Bed and Breakfast no baja de los 100€ noche en la zona de Victoria, por ejemplo, aunque los hay más baratos en zonas más alejadas del centro.
Al ser solo una estancia de 2 noches tampoco queríamos gastar mucho dinero y la zona de Victoria, un lugar céntrico de Londres, cerca de Victoria Station, era el lugar idóneo, ya que además conocíamos la zona de nuestra primera estancia en Londres.
Encontrar un hotel barato y céntrico pasa por compartir habitación o bien decidirte por la opción de los easyHotels, hoteles a la mínima expresión, como yo los califico, donde la habitación más barata apenas tiene sel espació para la cama, la ducha y para poder cerrar la puerta.
Así que nos decidimos por esta opción, total y como se suele decir en caso de viajes, solo queríamos el hotel para dormir por las noches, así que nos decidimos por la habitación más barata, sin ventana, con cama de matrimonio y aseo.
easyHotel London Victoria, hotel barato en el centro del Londres:
Habitaciones minúsculas, donde todos los extras son de pago, y en los que por poco dinero puedes pasar la noche.
Reservamos habitación en el easyHotel London Victoria, es decir, a 3 minutos de la estación Victoria, zona que ya conocíamos de nuestra anterior visita a Londres, como hemos dicho anteriormente. Una zona bastante tranquila y llena de B&B.
Un hotel barato así que por poco más de 40€ por noche, reservamos una habitación simple, sin ventana, eso si, con baño. En la reserva ponía bien claro que el Check In era a las 15 horas, ni un minuto antes, como después comprobaríamos.
Como íbamos de barato, el vuelo lo hicimos también por EasyJet, saliendo desde Madrid bien temprano y llegando a Londres a primera hora de la mañana. Reservados por internet llevábamos los traslados desde el aeropuerto a Londres y viceversa, también en la misma compañía, es decir, EasyBus, que te deja en la misma Estación Victoria.
Así pues, un viernes a las 10 de la mañana hora inglesa nos encontrábamos bajando del Easybus en la Estación Victoria, con la mente puesta en hacer tiempo hasta las 15 horas.
Después de pasear lo paseable, ver escaparates, tomar cafés, etc, el hambre y el cansancio se apoderó de nosotros, con lo que decidimos entrar en un Mark and Spencer, en Victoria, y comprar algo de comer y aprovechar para comprar el desayuno del día siguiente.
Ya con las 15 horas en nuestro reloj nos dirigimos, estación Victoria abajo, hasta nuestro hotel barato en Londres, el easyHotel London Victoria, pero nuestra sorpresa fue que no pudimos hacer el check in, pues nuestro reloj marcaba las 15 horas Españolas, una hora menos en Inglaterra, y el recepcionista se mostró tajante a la hora de decirnos que había que esperar una hora.
Esa hora la aprovechamos almorzando en la acera cercana, como algunos oficinistas de un edificio próximo que salían a comer.
Dadas las 15 horas pudimos hacer el check in y comprobar, de primera persona, como era un easyHotel u Hotel barato en el centro de Londres. En recepción se nos dijo bien claro la hora de abandonar el hotel, además, nos facilitaron un folleto donde se especificaba el precio de los complementos, es decir toallas extras, televisión, limpieza de la habitación, wifi, etc.
Ya con las tarjetas de entrada subimos a un segundo piso sin ascensor, donde entramos un pasillo perfectamente iluminado y con multitud de puertas naranjas con grandes números en blanco y la marca de la casa, Easy, por todos lados, como un gran escaparate comercial.
Dimos con la puerta de nuestra habitación y al abrir comprobamos que no nos mentían a la hora de calificar las habitaciones: mínimas y con lo justo para dormir y ducharse. Era el precio de un hotel barato en Londres.
La puerta abre hacia dentro, teniendo el hueco justo para que haga su recorrido y entremos los dos. Una vez dentro, ya se puede cerrar. Frente a la puerta de entrada, el baño. No se pueden abrir las dos puertas a la vez, o abres la del pasillo, o abres la del baño, ya que el pequeño cuadrado, por cierto, forrado de una especia de tela asfáltica, es el mínimo para el recorrido de ambas puertas, cada una en un sentido.
La cama, de matrimonio, se encuentra encajada en el hueco que deja la pared colindante con la otra habitación y la del baño, es decir, 2 metros de ancha la cama x 1 del baño, es decir, 3 metros el ancho de la habitación x 2 metros de larga, justo lo que ocupa la cama.
De cabecero teníamos los interruptores de la luz y en frente, una pequeña pantalla de televisión inservible, ya que necesitas alquilar el mando, que se hace por 24 horas.
El aseo, de 1×1 metro, es más propio de un avión que de un hotel. Un pequeños lavabo como el de los aviones, la taza y una ducha, todo junto, sin cortinas, pues cuando te duchas, todo se moja, todo se inunda.
La sensación de claustrofobia, de angustia la intentaba mitigar una salida de aire sobre la cama, que suponemos tendría la misión de airear y surtir de aire respirable al hueco donde dormiríamos.
Así pasamos dos noches en Londres, pero todo hay que decirlo, a mi la cama me pareció muy cómoda, más que la de otros hoteles con más estrellas o amplios en los que he estado.
En definitiva, si eres de los que busca un hotel barato en el centro de Londres y de los que solo usan el hotel para dormir y ducharse, el easyHotel puede ser tu solución, una cadena de hoteles que dispone de otros hoteles baratos en distintas zonas de Londres.
