Edimburgo es una de esas ciudades que yo califico de fascinantes. Fácil de recorrer, cargada de historia y sorprendente, donde siempre echarás en falta días para zambullirte en ella.
Pese a lo fascinante que resulta Edimburgo, si vas a estar en la ciudad bastantes días, nunca estará de más realizar alguna visita a otra localidad, en la Edimburgo turística encontrarás muchas ofertas de tours. De las visitas más demandadas es la de visitar la cercana localidad de Stirling. Ciudad que forma parte de la historia Escocesa, al disputarse allí una de las batallas más célebre de la historia del país y por ser sede de un recomendable castillo y del Monumento Nacional a William Wallance, héroe nacional Escocés.
Nosotros decidimos dedicar un día de nuestra estancia en Edimburgo a visitar la localidad de Stirling, a la que nos desplazamos en autobús desde la estación de St. Andrews en el centro de Edimburgo. Por 13 Libras, ida y vuelta, el bus 909 de Citylink no llevó en una hora aproximadamente hasta la moderna estación de autobuses de Stirling, que alberga también un centro comercial.
El Monumento a William Wallance no fue nuestro primer destino en Stirling, antes teníamos decidido visitar el Castillo, visita imprescindible si visitas la localidad. A él nos desplazamos andando, subiendo por las calles desde la estación de Stirling y descubriendo en plena subida el maravilloso rincón del Cementerio de Holyrude en el que hay un maravilloso mirador desde el que se puede contemplar el Castillo entre la niebla, fuimos en Enero, y las montañas nevadas.
Al Monumento a William Wallence llegamos en taxi, es la opción más rápida, aunque no optamos por este transporte por rapidez, más bien por desinformación ya que durante el camino de bajada del castillo no encontramos nada de información sobre cómo llegar al Monumento a William Wallance en transporte público, así que no decidimos por bajar hasta la estación de trenes y tomar un taxi. El desplazamiento hasta el Monumento a William Wallance nos costó 5,50 Libras y apenas duró 10 minutos en los que un animado taxista entabló conversación conmigo preguntando sobre mis simpatías futboleras.
Subida al Monumento a William Wallance:
El Monumento a William Wallance se levanta en la cima del monte Abbey Craig a las afueras de Stirling. Consiste en una torre construida en 1865 para conmemorar a la memoria de William Wallance, héroe Escoces que luchó contra los Ingleses.
En la base del monte se levanta una tienda de suvernirs y recuerdos que sirve a la misma vez de taquilla donde se puede adquirir los tickets de acceso al Monumento (6,50 Libras).
Desde la misma tienda se puede optar por subir el monte en uno de los microbuses gratuitos que te dejan en la misma puerta de la torre o bien subir andando por una inclinada carretera.
La torre que forma el Monumento a Willian Wallance no tiene ningún misterio ni nada especial. Se compone de una escalera de caracol, 248 escalones hasta lo más alto. Entre medias, 3 salas que más que de exposición sirven para el descanso del visitante.
Una primera sala donde se puede ver en una pantalla un video recreando el juicio y muerte de William Wallance. En la segunda sala se pueden observar bustos en marmol que representan a los hombres más ilustres de la historia de Escocia, donde precisamente no está el de William Wallance, pero si la que dicen que fue su espada. Para terminar, una tercera sala de exposición que recoge numerosos documentos y fotografías sobre la historia del Monumento a William Wallance, su financiación y construcción.
El plato fuerte del Monumento a William Wallance llega con el acceso a la terraza en el piso superior desde la que se obtienen una impresionantes vistas a Ochil Hills y al Valle del río Forth donde se dice que tuvo lugar la batalla donde las tropas Escocesas derrotaron a las Inglesas.
Una vez finalizada nuestra visita, que como os he dicho, tuvo su punto de máximo interés en la subida hasta la terraza del Monumento a William Wallance para observar sus vistas, pusimos de nuevo rumbo a Stirling. El microbús nos dejó en la salida del complejo, junto a la carretera, donde hay una pequeña marquesina de bus. Allí esperamos por unos 30 minutos el bus MA3 que nos llevó hasta la Estación de Autobuses de Stirling por 1,60 Libras.
